cuentos para la antologia

MI VIDA


Mi nombre es Eduardo Samarripa, trabajo en Miami y soy un agente mayor que un policía, menor que del ejército, trabajo solo, tengo un carro, un apartamento y resuelvo casos como un solitario agente que trabaja para quien necesita ayuda.
Hoy es martes 30 de diciembre de 2005, no he tenido un caso en varias semanas,¿Qué es eso? Humo en la calle 43 entre 2 y 9, hay humo saliendo de un apartamento. ¡Es el mío! Estoy sospechando que alguien quiso que tomara unas largas vacaciones, sin regresar; cambiaré mi nombre, mi profesión; ahora me llamo Charles Jonson, trabajo para el que me contrate y hago cualquier trabajo, haciendo énfasis en “cualquier trabajo”. Para el tipo de trabajo que me gusta desempeñar necesito unas matemáticas exactas, y tengo que estudiar medicina, cardiología y el aparato circulatorio.
Mi trabajo era el de un vengador, y tenía que vengarme de los que mi patrón me decía que tenía que eliminar, a mí no me importaba, lo que me pedían que hiciera, yo solo necesitaba la dirección y el trabajo ya estaba hecho.
Mi trabajo actual, como ya les había dicho soy un “vengador”, yo mato y me pagan, tengo casi todo, y se preguntaran ¿Qué me falta? Lo que me falta es saber quien trató me matarme, cuando sepa eso, yo haré mi trabajo gratis.
A veces me pregunto que hubiese pasado si ese día no hubiese salido de mi casa, a estas alturas estuviese muerto, o seguiría medio vivo.
Pero necesito enfocarme en mi trabajo, me pregunto si debería dejar mi trabajo, y seguir con mi vida, tal vez me tomé demasiado en serio mi trabajo, debería buscar una salida mejor a mi ira y a mi rabia comprimida, debería buscar redención para todos los actos que he realizado en este mundo.
No encuentro sentido a lo que hago, estoy tratando de cambiar un poco, creo que es hora de iniciar una nueva vida, sin tantas complicaciones, ni problemas, de ahora en adelante, me dedicaré a otro tipo de actividades, para empezar me iré a otra ciudad, donde nadie me conozca, y trataré de de ser otra persona, un ser más humano, comprensible y con menos coraje de todo lo que me sucede, ya no me dedicaré a matar, o a vengarme de las personas, simplemente, escribiré todas mis vivencias que me han ocurrido durante toda mi existencia.
Ya me voy a otra ciudad, estoy empacando mis cosas, y algunas las estoy vendiendo, hoy quiero dedicarme a leer un libro, las personas han estado viniendo a la casa a comprar algunas artículos que estoy vendiendo, nadie de mis vecinos pensó que algún día me iría de acá.
Por fin ya es de noche, y todo ha quedado listo, todo esta guardado, mañana será un nuevo día y yo seré una nueva persona, tomaré mi carro, y me iré manejando hasta llegar a Los Angeles, en esa ciudad me depara una nueva vida, nadie me conoce, y no sabrán que en un tiempo me dediqué a ser un matón a sueldo, no seguiré con mis cosas, daré vuelta a la pagina, y borrón y cuenta nueva.
Ya estoy es Los Angeles, estoy empezando una nueva vida, sin tantas complicaciones, como las tuve un día, estoy buscando trabajo, y conocí a unas personas extraordinarias, que me están tratando muy bien, tengo un nuevo trabajo, y por fin puedo decir, que mi vida es otra, que tengo una nueva vida, por fin soy feliz, y si se puede lograr.

LAS MEDICINAS DEL DOCTOR

Una fría mañana, el, profesor de la Universidad de Medicina John Stewart se iba de viaje a dar unas conferencias con su asistente Ana McCain, mientras estaban viajando el le comentó a su asistente que el necesitaba dedicarse más a la medicina o necesitaba realizar un descubrimiento para tener una experiencia mejor en este campo. En ese momento decidió escribir sus memorias y las anécdotas más importantes desde que estaba estudiando.
Al terminar la Universidad, empecé a trabajar en mi casa curando a mis amigos y familiares, después fui descubriendo que si uno es un buen doctor, los mismos pacientes te van recomendando y así te haces de nuevos pacientes, te pagan bien por tu trabajo, pero la carrera de medico, tiene muchos sacrificios.
Al poco tiempo me ofrecen un trabajo en un pueblo lejano de la ciudad, y acepto el trabajo, me voy, y al llegar me doy cuenta de que el doctor es una persona muy querida y respetada. Trabajo para una compañía maderera, y todos los pacientes, van a verme y me cuentan todos los problemas y enfermedades que tienen. En este pueblo estuve diez años, atendiendo a los pacientes enfermos, a las mujeres que daban a luz, y los accidentados, a todos se les atendía de la mejor manera.
Pero un día me doy cuenta de que quiero progresar, y no me quiero quedar para siempre en el pueblo, por eso me voy a la ciudad, a hacer una especialidad, y me convierto en un brillante cirujano, y después de tres años de estudios, regreso a la casa de mis padres, pero con un nuevo trabajo y una nueva encomienda, sanar y curar a todos los pacientes que me vayan a pedir ayuda y enseñar en la Universidad todo lo que aprendí.
Así es como me dedico a viajar para dar conferencia y a dar clases en la Universidad.
El trabajo de doctor es de mucho sacrificio, pero vale la pena cuando vez que tu enfermo ya sanó, y te sientes muy triste cuando se termina la vida de alguien, aún cuando hiciste todo lo que estuvo a tu alcance.
Quiero dedicarme a la investigación, para descubrir nuevas medicinas para curar las enfermedades, que aún no son curables.
Las medicinas y las vacunas son una parte muy importante en la vida de las personas, ya que sirven para curar y/o prevenir enfermedades.
A partir de este momento, me dediqué al campo de la investigación, junto con otros colegas, para descubrir nuevas curas para las enfermedades que van apareciendo, y que ironías de la vida, un día me siento mal y me realizan estudios y análisis, y después de todos los estudios, me detectan una rara enfermedad, que no tiene cura, ironías de la vida, yo doctor, no pude curarme, habiendo curado a tanta gente, después de dedicarme en cuerpo y alma a la medicina, a mi me toca perder la batalla con la enfermedad, y no hubo medicinas para mí que me curaran.








UN CUENTO DE TERROR

Una noche el joven Carlos se estaba preparando para ir a su cama; había cenado, su mochila ya estaba preparada para el día siguiente.
El sabia que tenia que escribir un ensayo del día de los muertos pero en ese momento no se le ocurrió nada creativo y en ese momento sintió que le temblaban las piernas y que ya no podía mas y cayo rendido al suelo en ese momento tuvo el sueño mas impactante de su vida, soñó que se sentía como despierto pero se vio en un terrible aprieto observo que caía de su balcón y el sintió la caída y siguió cayendo y cayendo hasta que; toco el piso y en ese momento abrió los ojos y se encontró en una cueva muy grande donde estaban enterrados unos cuerpos de personas mutiladas, cuando el ve esos cuerpos, se sorprende, y sale corriendo de la cueva, pero al salir, sorpresa, no hay nada alrededor de la misma, entonces se asusta, y decide quedarse a dormir en la cueva, para levantarse al día siguiente muy temprano y salir de allá, pero al entrar, ya no están los cuerpos que había visto. En ese momento, pensó que esta pasando, me estaré volviendo loco, o están tratando de asustarme, y decidió acostarse, pero en ese momento, escucha ruidos afuera de la cueva, y se esconde, son unos seres extraños que estaban trayendo nuevamente otros cadáveres y escucho que tenían que quedarse allá, y el pensó, que hare para que no me encuentren, se adentro mas y se espanto de todo lo que tenían en esa cueva, cuerpos mutilados, cabezas despedazadas, pedazos de dedos, fue algo tan espantoso, que le dieron ganas de vomitar, y sintió tanto asco, que del susto se desmayo. Al recuperarse, se encuentra con una mujer de cabello negro y largo, con una bata larga y le dice que necesitaba de su ayuda para salir de allá; pero ella le dijo que no podía ayudarlo, porque el había descubierto lo que tenían en la cueva, y el ya nunca podría salir de allá, el se asusto y quiso correr pero se levantaron unos seres que era mitad hombres y mitad monos y lo atraparon y lo amarraron para que no se pudiera escapar. Después entrar otros seres con dos personas mas que las encontraron afuera merodeando, y los amarraron junto a el, y hablaron con Carlos, y le contaron también que en el pueblo todos estaban muriendo, y solos ellos quedaban, estos seres necesitaban de la sangre y de los huesos de los seres vivos. Entonces se ponen de acuerdo para que Carlos, y los otros dos, pudieran escapar de allá. Al anochecer estando sentados se acercan a unas piedras y tallando los amarres que tenían se desatan y tratan de escapar pero en la entrada de la cueva los estaban esperando los vigilantes de la misma que eran unos seres vestidos todos de negro, era la hora esperada, era el encuentro con la muerte, en ese momento lo único que se les ocurrió fue rezar y pedir, que no fuera tan horrible y espantosa como se la imaginaban, al ver esos cadáveres allá. Los amarran nuevamente y los acomodan en unas mesas grandes, al estar los tres acomodados, viene un verdugo con un hacha, y en ese momento, aparece una nube de humo blanca, y a punto de ser asesinados, Carlos es despertado por su mama, y le dice es hora de levantarse para ir a la escuela. En ese momento, le dice a su mamá, que tuvo un sueño de lo más raro y espantoso, y su mamá le dice, que si no es porque se acerca el día de muertos., y Carlos entra al baño y al entrar se mira en el espejo y ve que su pelo estaba cortado. ¿Lo habré soñado o fue real?